Como parte de nuestra labor como docentes es guiar siempre a los niños con la mejor actitud posible, no solo para crear un ambiente de confianza, sino para que los niños sientan el gusto por permanecer en el aula, atentos y motivados día con día.
Hoy una niña comenzó a llorar cuando entro al salón, por que se sentía mal, aunque para ser realista lo que la alumna quería era irse de la escuela, pues sus papas llegaron a verla y la niña se encontraba bien, era solo que estaba algo preocupada, de cierta manera había estado pasando por momentos incómodos que muchas veces pasan de ser percibidos por nosotros los maestros, resulta que cada vez que iba por su desayuno un niño la molestaba, sin embargo ella no nos comunico lo que sucedía fueron sus padres los que notificaron el hecho de que Perla ya no quisiera ir a la escuela. después de que la maestra hablara con los papas acerca de estar mas al pendiente de la niña, y conversar con ella , la niña se integro de nuevo al grupo y trabajo normalmente, se le estuvo motivando y recalcando que es una niña muy inteligente y trabajadora, de nuevo agarro la seguridad, y la clase siguió normalmente. Este asunto me llamo la atención pues muchas veces nos alejamos de lo que los alumnos enfrentan a la hora del recreo, sin socializar, y sin nada simplemente los dejamos salir y nosotros continuamos en nuestras aulas, ocupado en muchas cosas, pero sin conocer que afuera ocurren cosas que ni imaginamos y que esta al alcance de solucionar cualquier imprevisto que afecte a nuestros alumnos.
Para concluir el este día que por cierto fue corto debido a la quincena que cobran los maestros, lo que se logro trabajar fue acerca de notas informativas en español, al igual que contar con la participación que se da rara vez tener el apoyo de la psicóloga y las maestras de educación especial, para trabajar unas actividades con los niños y en particular con Hanna, con el fin de incluir cada vez mas a la niña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario